Cuando se cumplen cuarenta años de la guerra del Yom Kippur, han sido desclasificados parte de los testimonios de la entonces primer ministro Golda Meir ante la Comisión Agranat, que investigaba posibles errores e incompetencias por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel durante la guerra.
Entre otras cuestiones, Meir defendió ante la Comisión su decisión de no lanzar un ataque preventivo pese a los informes de inteligencia que advertían del posible ataque enemigo, entre otros motivos porque temía que las fuerzas israelíes no estuvieran preparadas para ello y, especialmente, sospechaba que la reacción de la comunidad internacional sería negativa si Israel atacaba primero y no ayudarían al país durante la contienda.