Contextos

Lo que asociarse con Rusia supondría para los kurdos de Siria

Por Haid Haid 

Bandera del Estado independiente de los kurdos
"El comentario que hizo Putin ante la Asamblea General de Naciones Unidas acerca del positivo papel de los kurdos indica asimismo que Rusia podría considerar asociarse con ellos. La posibilidad de dicha cooperación plantea numerosas cuestiones: ¿cómo afectaría ésta a la alianza entre kurdos y estadounidenses? ¿Cómo reaccionaría Turquía? ¿Cambiaría la relación entre los kurdos y los grupos rebeldes?""Combatir al Estado Islámico no parece ser la prioridad rusa, dado que sus ataques aéreos han ido dirigidos principalmente contra otros grupos rebeldes"

Los kurdos de Siria han acogido favorablemente la reciente intervención militar rusa en su país, y se han mostrado dispuestos a combatir al Estado Islámico junto a los rusos. En una entrevista privada, Salih Muslim, copresidente del Partido de Unión Democrática (PYD), principal representante kurdo en la escena siria, declaró: “Lucharemos junto a cualquiera que combata contra el Daesh [el Estado Islámico]”. Sepan Hemo, comandante general de las Unidades de Protección Popular (YPG), también se mostró dispuesto a cooperar con Rusia y pidió apoyo militar:

Queremos apoyo aéreo ruso contra el Estado Islámico. Queremos armas. Podemos colaborar con Rusia contra el Estado Islámico.

Si bien la prioridad de Rusia en Siria es proteger al régimen de Asad, ello no parece preocupar a las YPG, centradas en aumentar su poder y extender su territorio. La retirada de las fuerzas de seguridad rusas en el verano de 2012 les permitió controlar localmente sus regiones y convertirse allí en el principal poder sin tener que luchar por ello, y no están interesadas en combatir contra Asad a menos que éste ataque primero y trate de recuperar terreno controlado por ellas.

El comentario que hizo Putin ante la Asamblea General de Naciones Unidas acerca del positivo papel de los kurdos indica asimismo que Rusia podría considerar asociarse con ellos. La posibilidad de dicha cooperación plantea numerosas cuestiones: ¿cómo afectaría ésta a la alianza entre kurdos y estadounidenses? ¿Cómo reaccionaría Turquía? ¿Cambiaría la relación entre los kurdos y los grupos rebeldes?

Intereses comunes

Los kurdos de Siria podrían mostrarse favorables al apoyo ruso porque es poco probable que Moscú muestre demasiada consideración por los intereses turcos. Rusia considera que los territorios próximos a su frontera gobernados por los kurdos suponen una amenaza para su seguridad. Los kurdos también creen que el apoyo que están recibiendo de Estados Unidos en su lucha contra el Estado Islámico es insuficiente y culpan de ello a la influencia turca.

Los siro-kurdos también consideran que la intervención rusa sería un medio de impedir que Turquía los ataque en Siria. El PYD y las YPG están afiliadas al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que lleva más de 30 años luchando contra las autoridades turcas Las tensiones entre el PYD y Ankara han aumentado desde que los turcos iniciaron sus recientes ataques contra el PKK en agosto de 2015. El primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, amenazó con atacar a las YPG si apoyaban los ataques del PKK en Turquía:

Si hay alguna filtración procedente de Siria, como en Irak [sic], (…) no dudaremos en atacar a cualquier grupo que suponga una amenaza para nuestra seguridad nacional.

Sin embargo, Salih Muslim cree que los rusos no permitirán que suceda algo semejante, no tanto por defender a los kurdos como para proteger la frontera siria. “Rusia tiene un acuerdo de defensa conjunta con Siria”, afirmó. “No permitirá una intervención turca, no para defendernos [a los kurdos], sino para defender la frontera siria”.

Rusia también podría valerse de semejante asociación para aumentar la popularidad de su coalición contra el Estado Islámico. Con el apoyo aéreo de la coalición liderada por Estados Unidos, en los últimos meses los kurdos pudieron romper el asedio de Kobane y expulsar al Estado Islámico de un territorio de una extensión próxima a los 11.000 kilómetros cuadrados en el norte de Siria. Lograr que se unieran a la coalición rusa, compuesta en su mayor parte por defensores de Asad, mejoraría su imagen.

Inconvenientes

Hay razones prácticas y estrategias para que los kurdos de Siria reconsideren esta opción. En primer lugar, combatir al Estado Islámico no parece ser la prioridad rusa, dado que sus ataques aéreos han ido dirigidos principalmente contra otros grupos rebeldes, incluidos los apoyados por la CIA. Si se considerara que los kurdos son fuerzas favorables a Asad se arriesgarían a ser atacados por grupos rebeldes.Muchos de ellos, incluidos los Hermanos Musulmanes sirios y el Consejo Islámico Sirio, ya han emitido fetuas contra las fuerzas rusas en Siria, consideradas ocupantes, lo que obliga a luchar contra ellas. Una asociación con Rusia también suscitaría preocupación por el futuro de la Alianza de las YPG con el Ejército Libre Sirio y, por supuesto, por el futuro de la relaciones árabo-kurdas en Siria.

Probablemente, una alianza pública del PYD con Rusia y Asad aumentaría la habitual desconfianza turca hacia el grupo, y, por tanto, Ankara podría adoptar medidas extremas en su contra. Turquía tiene fuertes vínculos con rebeldes y tribus árabes de Siria que podrían ser movilizados contra las YPG. La importancia de los siro-kurdos en la lucha contra el Estado Islámico podría no superar la que Turquía tiene para Estados Unidos, y por eso los norteamericanos podrían hacer la vista gorda ante los ataques turcos contra los kurdos, sobre todo si se considerara que éstos suponían una amenaza para la seguridad nacional turca.

El apoyo estadounidense a las Unidades de Defensa Popular en su lucha contra el Estado Islámico fue decisivo para derrotar localmente al grupo terrorista. Las YPG  probablemente recibirían menos apoyo ruso ya que, a diferencia de Estados Unidos, Rusia tiene otras socios en el campo de batalla sirio. Además los territorios controlados por ellas resultan insignificantes para la supervivencia del régimen sirio, así que probablemente defenderlos no sea en absoluto una prioridad para los rusos. No es seguro que asociarse con Moscú haga que desaparezca el apoyo estadounidense a las YPG, pero la Administración Obama podría perfectamente ser más cauta y reducir su apoyo si las fuerzas kurdas llegaran a considerarse invasoras en zonas de mayoría árabe.

No hay indicios claros de que una coalición kurdo-rusa ayudara a que las YPG estuvieran en mejor posición frente al Estado Islámico. Al contrario: es muy probable que ello aumentara las tensiones entre kurdos y turcos y que afectara negativamente a los intentos de los sirios, tanto árabes como kurdos, de construir un país para todos.

© Versión original (en inglés): NOW
© Versión en español: Revista El Medio