Yosi Beilin vuelve a la carga con una suerte de actualización de la Iniciativa de Ginebra.
Lo último que ha de hacerse es recompensar la intransigencia del liderazgo palestino.
La antropóloga Jillian Lennon advierte de que la presión internacional por llegar a un acuerdo es contraproducente.
Han motivado a los palestinos a creer que todavía tienen una oportunidad de conseguir doblegar a Israel.
El ‘rais’ palestino no quiere convivir con Israel, sino sustituirlo.
Lamentablemente, como demuestra la última encuesta, la mayoría de los palestinos comparten la ideología de Hamás.
«En el nombre de Dios, en el nombre de la religión, queremos liberar Palestina”.
El golpe de Hamás en Gaza (2007) selló su destino.
Ya hay un Estado palestino. Se llama Jordania. No hace falta crear otro.
Los palestinos no reúnen las condiciones mínimas para la estadidad.