La exministra de Justicia, única mujer que encabeza un partido en el Estado judío.
Aunque algunos quizá no estén dispuestos a admitirlo, nadie es indispensable, ni siquiera Netanyahu.
Bibi no cae tanto por las acciones de unos rivales malévolos o por factores externos como por sus propios defectos.
Ben Gurión fundó el país y Bibi lo transformó. Son dos líderes históricos, sin los cuales es imposible entender Israel.
‘Bibi’ sale muy reforzado de unas elecciones que se planteaban como un plebiscito sobre su figura.
Netanyahu, en el 4º lugar de la lista Forbes.
Daniel Pipes: «¿Debe un ministro israelí decir algo así?”.
Escandalosa decisión de la Corte Suprema israelí en favor de cuatro miembros de la organización terrorista islamista.
Sólo se consideraría abrir causa penal a los multirreincidentes.
El Estado judío ya no es lo que era; en buena medida gracias a Netanyahu.