Ankara ha anunciado que permitirá a los peshmerga iraquíes llegar la ciudad fronteriza sitiada para incorporarse a la batalla contra el Estado Islámico, tal y como le ha venido solicitando la Casa Blanca.
El anuncio, realizado por el ministro turco de Asuntos Exteriores, Mevlut Cavusoglu, llega en un momento en el que, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, los terroristas han lanzado un ataque conjunto «en todos los frentes de la ciudad».
Miembros del EI lanzaron unos 15 ataques contra las fuerzas kurdas desplegadas en el norte del país.También han atacado la presa de Mosul, una posición estratégica, y renovado su ofensiva en la cordillera de Sinjar, repelida por los peshmerga, al igual que otra similar en el valle de Nínive.
Dos meses después finalizar la operación Margen Protector en Gaza, los representantes de los dos bandos se podrían volver a reunir gracias a una invitación de Egipto para retomar las negociaciones. La fecha probable del encuentro sería el próximo día 27, pero el Gobierno israelí quiere asegurarse antes de que la reconstrucción de la Franja «no se utilice para la construcción de túneles, cohetes o cualquier otra cosa que tenga un propósito terrorista», según explicó el ministro de Inteligencia, Yuval Steinitz.
Los diputados libios han mostrado su apoyo a la operación Dignidad lanzada por el exoficial del Ejército de Gadafi Jalifa Haftar para erradicar a las organizaciones radicales islámicas que se han adueñado de gran parte del país.
El presidente del Parlamento, Farraj Hachem, asegura que a partir de ahora «Dignidad es una operación del Ejército libio».
El mayor número de víctimas se ha producido en un atentado suicida contra la casa de un oficial del Gobierno en la provincia de Rada in al Baida, en el que han fallecido al menos 13 personas, según fuentes médicas.
Por otra parte, la filial yemení de Al Qaeda se responsabiliza en un comunicado del ataque terrorista contra la casa de un líder local de los huzis en el que han muerto guardias armados. Otros dos atentados en las afueras de Rada y la provincia limítrofe de Ib han dejado al menos otras 10 víctimas mortales.
Al menos cuatro oficiales afganos han sido asesinados a primeras horas de esta mañana, cuando una bomba por control remoto ha explotado al paso de un vehículo de transporte de las Fuerzas Armadas en la capital.