Revista de Prensa

Turquía acusa a Rusia de perpetrar una limpieza étnica en Siria

 

Vladímir Putin, presidente de Rusia.
"Los delegados de las fuerzas opositoras asisten al Consejo de Cooperación del Golfo, que se celebra en la capital saudí, en lo que parece el intento más ambicioso de unificar a los enemigos del presidente sirio Bashar al Asad"

El primer ministro turco cree que Moscú está fortaleciendo a los yihadistas del Estado Islámico, según ha declarado a los corresponsales extranjeros. Davutoglu ha acusado a Rusia de estar llevando a cabo una campaña de limpieza étnica en la zona de Latakia, no obstante lo cual ha asegurado estar dispuesto a trabajar con Moscú para rebajar las tensiones entre ambos países por el derribo del caza ruso por el Ejército turco a finales del pasado mes de noviembre.

Los delegados de las fuerzas opositoras asisten al Consejo de Cooperación del Golfo, que se celebra en la capital saudí, en lo que parece el intento más ambicioso de unificar a los enemigos del presidente sirio Bashar al Asad.

Más de 100 delegados han sido invitados a la reunión, desde el grupo islamista insurgente Ahrar al Sham (fundado por yihadistas con vínculos con Al Qaeda) hasta varios grupos rebeldes con sede en Damasco.

El portavoz del departamento de Estado norteamericano, John Kirby, ha saludado esta iniciativa afirmando que «es un comienzo positivo porque están empezando a hacer algunos progresos».

El primer ataque, con dos víctimas, tuvo lugar en el centro de Hebrón, donde una de ellas resultó gravemente herida según ha informado el portavoz policial Micky Rosenfeld. Una de las víctimas es un soldado, que resultó apuñalado por un palestino al que previamente había detenido en un control. En el segundo de los ataques, los asaltantes dispararon contra un coche cerca de la ciudad cisjordana de Tulkarem, hiriendo a dos israelíes.

Los arrestados habían adquirido rifles y practicaban el disparo en un bosque, según las autoridades israelíes. La policía sospecha que los cinco detenidos podrían tener intención de llevar acabo un ataque, aunque no hay evidencias de que tuvieran ya preparado un complot.

Los cinco sospechosos cuentan con edades entre 18 y 27 años y comparten el apellido Sleiman, lo que sugiere que podrían estar vinculados por una relación de parentesco.

Así lo ha asegurado el presidente de Israel, Reuven Rivlin, de visita en la Casa Blanca, que ayer mantuvo una reunión privada con el presidente estadounidense. Según Rivlin, Obama está preocupado por la ausencia de contactos entre palestinos e israelíes, al tiempo que ha manifestado su pesimismo por el futuro político del líder palestino, Mahmud Abás, al que algunos rumores le atribuyen la intención de renunciar y disolver la Autoridad Palestina.