La organización terrorista Hamás, que detenta el poder en la Franja de Gaza, ha reconocido que construyó el túnel recientemente descubierto por el Ejército israelí. Fuentes del grupo islamista han asegurado que seguirán trabajando «en el suelo y por debajo de él» para secuestrar soldados israelíes y ofrecerlos como intercambio para la liberación de presos de su bando, por ser «la única manera de tener éxito contra la ocupación».