El Consejo de Seguridad hizo ayer un llamamiento a las fuerzas políticas libanesas para evitar que se desencadene una nueva guerra civil en el país. Al mismo tiempo, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, manifestó su preocupación por la implicación de Hezbolá en el conflicto sirio, debido a las «graves implicaciones para la estabilidad del Líbano y, por extensión, de toda la región» que conlleva.
La Fiscalía egipcia ha emitido una orden de detención contra Mohamed Badie y contra su número dos, Mahmud Ezat, por incitar a sus fieles a la violencia ante el cuartel general de la Guardia Republicana, donde el pasado lunes murieron 51 personas.
La Fiscalía está investigando a otros 650 islamistas por su presunta implicación en los actos de violencia desatados tras el derrocamiento de Mohamed Morsi.
Mientras Washington delibera sobre si el derrocamiento de Mohamed Morsi fue un golpe militar o no, el Pentágono sigue con su plan de enviar cuatro cazas al Ejército egipcio como parte de la ayuda anual, ayuda que sería suspendida en caso de que finalmente se considere que lo que se ha producido en Egipto ha sido un golpe de Estado contra un gobernante democráticamente electo.
Egipto es el segundo mayor perceptor mundial de ayuda militar por parte de EEUU detrás de Israel.
Bilal Sheik fue asesinado ayer junto a otras dos personas en un ataque terrorista con explosivos que dejó también nueve heridos.
El atentado se produjo cuando Sheik realizaba unas compras con vistas al inicio del Ramadán en el barrio de Guramandar.