El presidente norteamericano ha modificado sustancialmente su visión del mundo musulmán.
Los líderes palestinos y de la comunidad jaredí no pierden ocasión de perjudicar a los suyos.
El Consejo de la Shura pide al Gobierno saudí que incluya en el currículo de las escuelas públicas femeninas las actividades deportivas.
Hamás empleará cualquier método para propagar su mensaje de odio entre los niños palestinos. Incluso a Mickey Mouse.
La organización terrorista ha lanzado en Gaza el programa Futuwa, que tiene por objeto instruir a 37.000 adolescentes en el manejo de fusiles Kalashnikov, el lanzamiento de granadas y la colocación de explosivos.
Netanyahu, muy lejos de la mayoría necesaria para gobernar.
El racista antisemita Hüseyin Nihal Atsiz, uno de los más prominentes simpatizantes turcos del nazismo, sigue teniendo multitud de fans.
El ‘problema palestino’ se ha convertido en una estafa financiera y emocional.
Nadie ha hecho más que él en el último año para merecerlo.
Consideran que el furibundo rechazo de sus líderes es contraproducente para su causa.