Las denuncias sobre la degeneración moral de Israel no resisten el menor análisis.
Rusia niega que esté cambiando de posición en el conflicto sirio.
Las cifras desmontan la falacia de que el Estado israelí gasta buena parte de su presupuesto en expandir los asentamientos.
La nueva viceministra israelí de Exteriores sostiene que los diplomáticos de su país no deben quitar importancia a sus reivindicaciones territoriales.
La mayoría de los analistas consideran que va a ser un Ejecutivo muy inestable.
Es un político hábil, poco simpático, formado en e influido por los EEUU, al que no le tiembla el pulso ante nadie.
El giro a la derecha es consecuencia, en buena medida, de la intransigencia palestina.
Los votantes israelíes han aprendido de la historia de los últimos 20 años y obrado en consecuencia.
Contra todo pronóstico, Likud (30 escaños) supera ampliamente a la Unión Sionista (24).
Mientras Kerry hablaba de revivir el proceso, Hamás anunciaba que había completado sus preparativos para el próximo enfrentamiento.