El descaro de los israelíes (la jutzpá) y las condiciones extremas en que su país se ve obligado a vivir son el complemento de las políticas del Gobierno destinadas a incentivar el nacimiento de nuevas empresas y apoyar a los emprendedores.
A fecha de hoy existen 100 fondos de capital local en Israel y 300 internacionales. (…) 66 años [después] de su nacimiento como Estado y con poco más de 8 millones de habitantes, Israel es símbolo de liderazgo en innovación a nivel mundial, al ser el territorio con el mayor número de empresas con base tecnológica creadas en el mundo, 500 anualmente, sólo por debajo de Silicon Valley en Estados Unidos.
Estar rodeado por países en constante conflicto, tres guerras a cuestas y un nacimiento turbulento como Estado son algunos de los factores que el jefe de ciencia e innovación de Israel, Avi Hasson, dice que hacen de Israel una “startup perpetua”, además de la falta de recursos naturales como tierra fértil, agua o minerales. “La necesidad nos hizo creativos y hemos aprendido a tomar lo mejor de los fracasos y seguir intentando nuevas cosas. Nos beneficiamos del fracaso y estamos en constante renovación”, dijo el funcionario en entrevista.
(…) Microsoft, Intel y Alcatel Lucent son algunos ejemplos de (…) compañías [que invierten en Israel]. Para 2014, Intel anunció una inversión de 6.000 millones de dólares (…).
Yemen es un país más tolerante en lo que respecta a los derechos de las mujeres que, por ejemplo, Arabia Saudí. En Yemen las mujeres pueden conducir y tienen también derecho al voto; pero las costumbres ancestrales de una sociedad netamente conservadora en materia religiosa siguen convirtiendo la igualdad en un reto a largo plazo.
En este debate entre dos activistas yemeníes, Alia y Jamila, ambas involucradas en la defensa de los derechos de la mujer, se ponen de manifiesto los éxitos alcanzados y los desafíos que plantea el futuro.
Alia señaló que no son necesariamente los hombres los que oprimen a las mujeres en Yemen, sino que las propias mujeres se sienten cómodas con las funciones que les otorga la sociedad. Las mujeres enseñan esta sumisión a sus hijas. «Pero las yemeníes no son como a menudo se las retrata en los medios de comunicación: oprimidas, débiles y siempre vestidas de negro. Si se las ve en sus casas, se ve que son fuertes». (…) Por su parte, Jamila declaró que las mujeres que han vivido en el extranjero durante largos períodos de tiempo tienen un gran potencial para contribuir positivamente a la lucha por los derechos de las mujeres en Yemen, porque «regresan al país con convicciones mucho más fuertes».
En este reportaje del diario español El País se analizan los factores que influyen de manera más decisiva en la economía egipcia, desplomada en los últimos años a causa de la recesión mundial y del recelo internacional que suscitó el Gobierno islamista de Mohamed Morsi.
El nuevo presidente recibirá un país dependiente de las subvenciones y productos extranjeros y necesitado de impulsar la economía con decisiones que devuelvan la confianza a los actores internacionales.
En los muelles de Luxor se acumulan hileras de hasta seis grandes navíos. Una cincuentena de cruceros que surcaban a diario el Nilo llevan meses varados por la ausencia de turistas. Entre 2010 y 2013, los ingresos turísticos en Egipto pasaron de casi 14.000 millones de dólares (10.211 millones de euros) a menos de 6.000 millones (4.376 millones de euros). El frenazo del sector turístico es a la vez causa y reflejo de los problemas económicos del país, que el 26 y 27 de mayo celebrará sus segundas elecciones presidenciales del periodo posrevolucionario.
“La economía del país se ha podido mantener a flote gracias a las ayudas del Golfo”, sostiene Abu Basha. Hasta la semana pasada, se estimaba el apoyo financiero recibido durante los últimos diez meses en unos 12.000 millones de dólares (8.752 millones de euros), pero el candidato y exministro de Defensa Abdel Fatá al Sisi reveló que el dato real supera los 20.000 millones (14.587 millones de euros). “Es difícil ofrecer una cifra exacta, porque todo depende de qué valor asignemos a las remesas de petróleo de Arabia Saudí”, añade Abu Basha. Los Hermanos Musulmanes y los países del golfo Pérsico son acérrimos enemigos, lo que explica las generosas ayudas de las petromonarquías al régimen surgido el pasado verano del golpe de Estado contra el ‘rais’ islamista Mohamed Morsi.
En esta entrevista al líder del partido islamista Ennahda se repasan los últimos acontecimientos ocurridos en el país y las perspectivas de futuro en el orden político.
Túnez es el país que fue germen de la Primavera Árabe a finales de 2010 y en el que la revolución es vista desde el exterior con más esperanzas de futuro frente al caos que impera en Libia o Siria o la inestabilidad de Egipto. Acaba de estrenar Constitución y prepara ya las segundas elecciones de una nueva era tras las que ganaron en 2011 los islamistas del partido Ennahda que lidera Ganuchi.
Pero aquella victoria democrática no trajo la estabilidad. El descontento seguía al pie de la calle. Por un lado, muchos de los que se habían alzado contra Ben Alí se sentían defraudados. Por otro, los nuevos aires de cambio fueron de inmediato aprovechados por yihadistas radicales para tratar de mostrar sus intenciones de imponer por la fuerza la versión más estricta de la ‘sharía’ (ley islámica). Ellos, según las autoridades, son los responsables del asesinato a balazos en dos atentados distintos en 2013 de dos conocidos opositores del izquierdista Frente Popular. La oposición vio connivencia entre esos asesinos y las autoridades islamistas.
Esta situación llevó a Ennahda, que encabezaba la coalición gubernamental, a dar un paso atrás y pactar con el heterogéneo y mayoritariamente laico bloque opositor el pasado enero la creación de un Ejecutivo de transición integrado por tecnócratas. Ellos son los que llevan las riendas del país hasta las elecciones, que según la nueva Carta Magna, han de organizarse antes de finales de este año. Casi con seguridad, según Ganuchi, entre noviembre y diciembre.