Los palestinos prefieren la «lucha armada» y el terrorismo a las negociaciones de paz con Israel.
Porque no anda Israel de por medio: así de sangrante.
Sheldon Adelson ocupa ya un lugar de honor en los anales de la historia judía.
El pueblo judío tiene todo el derecho a instalarse en su patria ancestral.
El proceso de paz está estancado. Palestina está fracturada entre Gaza y Cisjordania. Israel vive bajo amenaza constante. Unas bodas de plata para el olvido.
Qué curioso: los musulmanes sólo parecen de acordarse de Jerusalén cuando está bajo control no musulmán.
«No habrá posibilidad de reconciliación si el mundo árabe sigue negando y distorsionando la historia judía».
El presidente de la Autoridad Palestina llegó a culpar a los judíos del Holocausto.
Las iglesias cristianas, en pie de guerra contra el Ayuntamiento de Jerusalén.