«Estoy muy agradecido de tener la oportunidad de contribuir a este esfuerzo humanitario».
¿Se verán los israelíes abocados a unas cuartas elecciones?
Da igual lo que digan o hagan Netanyahu o Gantz: son los palestinos los que no quieren la paz.
El acuerdo espacial del «ellos están allí y nosotros aquí» se intentó en Gaza y fracasó miserablemente.
Ben Gurión fundó el país y Bibi lo transformó. Son dos líderes históricos, sin los cuales es imposible entender Israel.
Son muchos los que quieren no una solución de dos Estados sino la aniquilación del único Estado judío del planeta.
La comunidad internacionales les alienta a creer que su sueño de acabar con Israel es conseguible.
El daño que hacen a su propio pueblo es tremendo.
«Cada cierto tiempo, los partidos concurren a las elecciones y, al final, siempre gana Netanyahu» (Boaz Bismuz).
Una batalla sorda de gran importancia para el Viejo Continente.