En el conflicto multidimensional que estamos viviendo, la propaganda es un arma de tremenda importancia estratégica.
La Guerra de los Seis Días sigue ejerciendo un poderoso influjo en el Estado judío.
El emirato «es lo contrario de Suiza: en lugar de no tomar partido, está en todos los bandos».
Deberíamos volcarnos en que ninguno de los bandos en liza tenga futuro.
Las relaciones El Cairo-Jerusalén han mejorado sensiblemente.
La amenaza iraní está motivando un cambio de visión en la región respecto del Estado judío.
Naser sigue siendo una figura divisiva (Menna Zaki, Times of Israel, 29 SEP 20) Cincuenta años después de la muerte de Gamal Abdel Naser, la controversia sobre el legado del carismático presidente egipcio que lideró la unidad árabe sigue viva en Egipto, mientras las profundas divisiones asuelan Oriente Medio. […] Naser fue jaleado como ariete contra […]
La semilla que estos árabes honorables han plantado tiene el potencial de germinar.
Hizo grandes sacrificios para que se alcanzara la paz y lo consiguió.