El célebre espía israelí salió este viernes de prisión, luego de permanecer 30 años encarcelado por pasar información norteamericana de inteligencia al Estado judío.
Pollard, de 61 años y condenado a cadena perpetua, estará en libertad condicional, deberá vivir en Nueva York el próximo lustro y tendrá vedado el acceso a internet. Tampoco podrá viajar a Israel durante ese tiempo, ni conceder entrevistas.
El destacado abogado criminalista Alan Dershowitz, que defendió en el pasado a Pollard, ha denunciado que las medidas que se le han impuesto con «totalmente irracionales».