Veintiuna personas resultaron heridas ayer en el atentado que tuvo por objetivo un autobús de la línea 12 de Jerusalén, en las inmediaciones del barrio de Talpiot, a las 5:45 de la tarde.
“Encontraremos al que puso la bomba, a quienes le enviaron y a quienes están detrás de ellos, y saldaremos la cuenta con esos terroristas”, ha prometido el primer ministro Netanyahu.
La organización terrorista islamista Hamás ha jaleado el ataque, pero no ha asumido la autoría.