Revista de Prensa

En defensa de Israel, contra la lacra del antisionismo

 

Bandera de Israel.

El escritor Yossi Klein Halevi, del Shalom Hartman Institute, reproduce en el Times of Israel un texto que leyó en la pasada conferencia anual del American Jewish Committee, en el que puso especial énfasis en la lucha contra la deslegitimación del Estado de Israel.

La amenaza más insidiosa del BDS [movimiento de boicot, desinversiones y sanciones contra Israel] no es económica sino ideológica. En los campus de todo el mundo, el mero término ‘sionismo’ se ha convertido en algo contaminado. De forma exasperante, cuanto más nos enraizamos como pueblo en nuestra tierra, más se desafía nuestra condición nativa. La creciente narrativa contra el sionismo es que una Europa culpable forzó la creación de un Estado judío en el mundo árabe, ignorando 4.000 años de conexión judía con esta tierra. Así que, de manera creciente, el Holocausto ya no es un argumento convincente para un Estado judío sino lo contrario, una parte esencial de la campaña antisionista que define a Israel como una entidad colonialista blanca y europea.

La salida de Dilma Rousseff del Gobierno brasileño podría suponer una buena noticia para el Estado judío, después de que el año pasado rechazara el nombramiento de Dani Dayán como embajador de Israel en Brasilia. Ahora bien, el cambio de Gobierno en el gigante sudamericano no tiene por qué desembocar necesariamente en una mejora en sus relaciones con Israel, advierte André Lajst, director del Israel Brazil Institute for Public Diplomacy

El ascenso al poder de un Gobierno más amigable es un buen augurio para Israel, pero también ha creado una reacción violenta por parte de la actual oposición política, que está en contra de la destitución de Rousseff. Desgraciadamente, las creencias políticas en Brasil son a menudo un juego de suma cero. Si Israel se se asocia con los partidos de la derecha, la izquierda siente que debe rechazarlo al margen de los hechos. Un votante de derechas o de izquierdas adopta íntegramente la agenda de su partido. Y si eso incluye estar contra Israel, un votante lo aceptará sin sin preguntar.

En Israel Hayom, Zalman Shoval, exembajador israelí en EEUU y diputado del Likud en la Knéset, analiza los resultados de la cumbre de París sobre el conflicto palestino-israelí.

Por lo que se refiere a los palestinos, el mero hecho de que la conferencia tuviera lugar y la posibilidad de que haya una secuela juega a su favor en el objetivo de internacionalizar el conflicto tanto como sea posible; en otras palabras: alcanzar un acuerdo escrito sin negociaciones directas con Israel y sin concesiones ni compromisos por su parte. La intención original de los franceses era incluso más radical y sesgada: reconocer de boquilla la idea de negociaciones pero anunciando desde el principio que si las negociaciones fallaban, París reconocería a un Estado palestino. En otras palabras, habría sido una invitación a que los palestinos siguieran con su terquedad.