Washington no debería tomarse a la ligera el afianzamiento del eje Caracas-Teherán.
Las relaciones Teherán-Caracas representan una grave amenaza para la seguridad nacional de EEUU.
El presidente venezolano no descarta trasladar la embajada a Jerusalén.
Piden a la Administración Trump que preste la mayor atención a lo que sucede en el país caribeño.
Habrían utilizado para ello la cadena HispanTV.
Teherán quiere tener una presencia sensible en el ‘patio trasero’ de EEUU.
La organización terrorista libanesa de obediencia iraní tiene una muy notable y turbia presencia en el país de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
Denuncian presuntos lazos entre Caracas y la organización chiita libanesa en el tráfico de drogas y de armas.
Todo vale contra el imperialismo yanqui, el sionismo y la derecha.
Al parecer, alguien ha incrustrado hoy en el ‘Kotel’ una gorra de las que llevan los partidarios del candidato de la oposición antichavista, Henrique Capriles, de origen judío y por ello víctima del antisemitismo bolivariano.