Bagdad se volcará ahora en la reconquista de Mosul.
Por mucho que Bagdad lo niegue, parece más una guerra contra los suníes que contra el ISIS.
¿Puede acabar Irak enfangada en un conflicto como el que asuela Siria?
Al Qaeda, un cáncer que no deja de metastatizarse.
«El problema es que sus combatientes quieren morir, y nosotros vivir».
Los suníes tienen razones de sobra para temer ser víctimas de una vasta operación de limpieza étnica.
«Es fácil ser enemigo de Estados Unidos, y muy difícil ser su amigo».
Llevará tiempo, pero el Estado Islámico perderá Mosul como perdió Tikrit y Faluya.
Sería un tremendo error dar por muerta a la formidable organización terrorista.
Si los suníes temen ser objeto de limpieza étnica, antes o después surgirá un ‘ISIS 3.0′.