Los ‘arabistas’ norteamericanos insisten en sus fracasadísimas recetas.
Son muchos los elementos que comparten estos enemigos de las democracias liberales.
Al dictador sirio no lo frenan sus patronos (Rusia e Irán) y recibe asistencia de Corea del Norte.
Los cristianos no pueden permanecer ambivalentes ante un mal de extraordinaria gravedad.
El sanguinario tirano sirio no tuvo jamás la menor intención de deshacerse de su arsenal químico.
Jerusalén advierte a Teherán: la Doctrina Beguin sigue vigente.
Más de 250 muertos en 48 horas.
Momento de gran bochorno en una base de Latakia.
El dictador sirio pretende afianzar su posición trazando líneas rojas a Israel.
EEUU de ninguna manera debería financiar la reconstrucción de un país dominado por Asad.